Resumen

El hermano de Isabel ha desaparecido. Un día, alguien se pone en contacto con ella y le dice que está vivo. A partir de entonces, la vida de Isabel cambiará por completo......

martes, 14 de diciembre de 2010

I love it (L)

I really love this song!

Llegas,
cuando estoy a punto de olvidarte;
busca tu camino en otra parte
mientras busco el tiempo que perdí...
QUE HOY ESTOY MEJOR SIN TI...

Capítulo 11 - Esa noche

Al entrar en casa, mi madre estaba ya esperándome en la puerta en una postura desafiante.
--¿Qué horas son éstas de llegar?--gritó--¿Te parece normal?
--Lo siento mami...
--Ni mami ni leches ¿Dónde estabas?
--Es que...Marcos tropezó y se torció un tobillo.Entonces tuve que estar con él hasta que vinieron a buscarlo.
--Vale...., ya hablaremos.--terminó mi madre la conversación, no muy convencida.
Subí corriendo a mi habitación. Necesitaba recuperarme. Habían pasado demasiadas cosas en una tarde.
--Te quiero mamá--grité desde mi cuarto antes de cerrar la puerta para sumergirme de lleno en mis pensamientos.
Necesitaba reorganizar mi mente. Eran tantos interrogantes sin respuesta.
¿Por qué no podía contar a nadie nada de esa tarde?
¿De qué conocían ellos a mi hermano?
¿Por qué me ataron al llegar si después fueron tan amables?
¿Qué habría querido decir Lucas con lo de que "ellos saben ya donde vives, no puedes marcharte"?
Lucas...
Acababa de conocerlo, y sin embargo es como si lo conociese de toda la vida. Me sentía protegida a su lado. Y me hacía desconectar. Solamente con rozarlo, los problemas se esfumaban de mi cabeza.

Me dejé caer en la cama. Estaba agotada, por lo que pronto me dormí.
Esa noche tuve un sueño muy raro. Estaba corriendo por la playa con Lucas y Marcos. Los tres reíamos y lo pasábamos bien, pero de repente, desaparecía todo. Y me quedaba sola en un lugar frío y totalmente negro. Y empecé a llorar.
Y así me desperté, empapada en lágrimas. Miré el reloj, eran las cuatro de la mañana. De repente, oí unos ruidos por el pasillo. Eran las voces de dos personas susurrando.......Pero mi padre trabajaba, por lo que en casa sólo estaba mi madre.....

Cogí una estatuilla de la repisa y salí al pasillo. Caminaba procurando no hacer ruido, y a la vez adivinando de dónde venían las voces. Poco tardé en tenerlo claro: venían del cuarto de mi de mi hermamo. Me detuve un instante junto a la puerta, me armé de valor y entré.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Capítulo 10 - El principio

Entonces me tomó la mano.Y en ese instante fue como si el tiempo se parase, un escalofrío me invadió y en mi estómago empezaron a revolotear millones de mariposas. Me condujo escaleras arriba. Llegamos a un pasillo al que daban 4 puertas, que eran curiosamente cada una de un color. Primero fuimos hacia una verde cual hierba de un campo en verano. Petó creando una curiosa melodía: Pum-pumpumpum-pum!
--Pumpum!!- se oyó desde dentro.
Al entrar me quedé fascinada. Las paredes de la habitación estaban pintadas de rosa, pero paneladas de blanco hasta la altura de la cintura. En una esquina había dos literas de madera blanca, con un montón de peluches sobre la de arriba; también colocados que parecía que nadie la hubiese tocado durante días. Había también, bajo una gran ventana, un escritorio negro; y enfrente, una cadena musical y dos pufs a sus lados.
--¿Quién es esa?--preguntó una niña que estaba sentada en uno de los pufs, jugando con una consola. No llegaría a los 9 años; y era rubia, con los ojos del mismo color azul que María.
--Es una nueva amiga. Se llama Isabel y, desde ahora vivirá con nosotros.
--¿Quééé? Nooo! Yo...yo tengo casa...y padres...no puedo
--Lo sé.--me interrumpió--Recuerda que conozco a tu hermano. Pero ya no puedes irte. Seguramente saben ya donde vives.
--¿Saben? ¿Quiénes? ¿Qué está pasando? ¿Dónde está mi hermano?--según iba hablando, mi voz elevaba su tono y mi agitación aumentaba.
--Isabel, yo... no sé qué contarte...
--La verdad!!!--Ésto fue más una súplica que un grito.
--Sabrás todo lo que necesites y puedas asimilar. Seguramente no obtendrás las respuestas que necesitas; pero ni siquiera nosotros las tenemos.
En ese momento, María entró en la habitación:
--¿Quieres quedarte a cenar?--preguntó con una voz de lo más  dulce.
--¿A cenar? ¿Qué hora es?
--Las nueve y media.
--Noo!! Llego tardísimo a casa.
--No te preocupes, yo te acerco.
--Os acompaño.--dijo Lucas rápidamente. María le contestó con una mirada divertida.
María pidió a Elena que terminase la cena. Durante el trayecto, hablamos sobre todo de música, deportes, películas.....; pero sobre todo reímos, y lo más curioso era el tono extremadamente dulce de María.
Cuando por fin llegamos, ella se dirigió a mí en un tono más serio:
--No puedes contarle a nadie dónde has pasado la tarde. Promételo.
--Lo prometo.--Hubo un breve silencio algo incómodo-- Debo irme.
--Hasta pronto. Volverás no?--dijo Lucas, casi en un susurro.
--Por supuesto. :)
Bajé del coche y corrí hacia casa; pero justo antes de abrir la puerta sonreír al coche, que ya se alejaba.
Mientras pensaba una escusa, en mi interior sabía que nada volvería a ser lo mismo.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Capítulo 9 - Lucas

Las lágrimas cubrían mis ojos impidiéndome ver. Sabía que había alguien a mi lado guiándome, y me dejé llevar. No me sentía con fuerzas para resistirme.
Acabé en una sala iluminada por la luz de sol, con un gran ventanal que daba al jardín, dos mullidos sofás, un televisor y un rincón con una gran librería y una butaca.
Pude distinguir perfectamente lo que me rodeaba, mi llanto había cesado y ya estaba más tranquila. Mi acompañante, que resultó ser la mujer de antes, me invitó a sentarme y me acercó un pañuelo.Le agradecí ese gesto con un leve movimiento de cabeza.
--¿Cómo has llegado?- preguntó fríamente una chica en la que no había reparado al entrar. Parecía más mayor que yo(unos cuatro o cinco años) pero no era mucho más alta; y tenía una larga melena pelirroja. La reconocí, salía en muchas de las fotografías.
--Tranquila, es la hermana de Daniel.- contestó la mujer.
--¿Sabe algo de él?- 'preguntó la chica.
-- No. Por eso vine aquí, pensé que podríais decirme algo acerca de él....- contesté con un débil susurro.
--Tranquila. Hay muchas cosas de las que hablar, pero todo a su tiempo.-dijo la mujer.-Por cierto, yo soy María, ella es Elena y...
--Yo soy Lucas-dijo el chico de antes, esbozando una sonrisa. La verdad es que era bastante guapo.Tendría más o menos mi edad, pero era un poco más alto. Tenía los ojos verdes y una preciosa sonrisa.....=)--Ven, te enseñaré la casa y te presentaré a los demás.